Emplazado en el centro del complejo cultural de la ciudad, el programa para el Museo de Arte de Tel Aviv plantea un desafío arquitectónico extraordinario: resolver la tensión entre un terreno estrecho, triangular y la necesidad de abrir una serie de galerías rectangulares de gran tamaño. La solución fue retorcerlas sutilmente en superficies geométricas (parábolas hiperbólicas) que conectan los ángulos dispares entre las galerías y el contexto, refractando la luz natural hasta lo más profundo del edificio semi-enterrado.
El edificio se construye de acuerdo a varios ejes que se desvían significativamente de un piso a otro. En esencia, es una serie de planos independientes en base a sistemas estructurales de acero, apilados uno encima del otro, conectados por circulaciones verticales.
http://www.plataformaarquitectura.cl/2012/11/30/amir-museo-de-arte-de-tel-aviv-preston-scott-cohen/